Es la chica más linda que he conocido. La más pura y sincera entre miles de estrellas. Se enamoró de mí después del primer beso. Yo me enamoré de ella desde que la vi. Me sonrió sin conocerme, y confió en mí sin comprenderme. Nos juramos amor, pero mi maldita confusión, terminó por tirar todo al vacío.
María Claudia…Mi María Claudia. Su cabellera negra doncella, de aroma a menta (siempre me pregunté la marca de su shampoo). Sonrisa perfecta, dientes blanquitos, encasillados a la medida. Labios provocativos, delgados, de sabor cereza (debido a su adicción a la goma de mascar). Blanca nieves en invierno, café con leche en verano. Su mirada, un milagro, el más puro semblante en ojos negros. Sexy, algunas noches, (en vestido, y sin él). Angelical, todo el tiempo. Seré honesto, no tiene un cuerpo perfecto, es rellenita, piernona y potoncita (toda una osita panda).
Hasta ahora no puedo creer que ya no estemos juntos, han pasado ya dos meses, y sigo en shock. Sé que fue mi culpa. Había terminado recién mi relación con Diana, después de tres años, cuando conocí a María Claudia. Fui un estúpido, lo sé. No logré olvidar del todo a Diana, y una noche, pasado de copas, me la encontré, y la besé. Fui honesto con la chica que me robó el corazón en tan solo un segundo (María Claudia). La que me enseñó que el amor existe, por más de que a veces, todo indique que no. Era de esperarse la reacción que tomó, tan solo llevábamos seis meses. Me mandó a volar, mientras lloraba a mares.
Intenté recuperarla, pero firme en su decisión, no me aceptó de vuelta. Sesenta y un días sin tenerla, por un estúpido desliz. No hay cosa más tonta, que el popular “Remenber” (Tener algo con una ex esporádicamente). Por otro lado, hace unos días me enteré de lo siguiente: “Jean Pierre, mi mejor amigo, ha estado enamorado de María Claudia desde que era un niño”. Él fue el que me la presentó, pero nunca me confesó su secreto, su primo fue el que lo hizo. Jean Pierre es la mejor persona que conozco, el chico de veinte años más maduro que existe en el mundo, según mi modesta opinión. Él es el mejor candidato para María Claudia, pero lastimosamente, no tiene el valor para declararle su amor. Se hizo a un lado cuando se dio cuenta que estaba enamorada de mí, me cedió el pase, confiando en que la podría hacer feliz. Aún sigo amando a María Claudia, aún sigue siendo Jean Pierre mi mejor amigo. Quizá sea descabellada mi idea, pero pienso unirlos, tan solo quiero lo mejor para mi ex.
Es difícil admitir que ya no será para mí. Puedo asegurar que me ha perdonado, pero igual, le he fallado, ese el punto.
No importa lo que tenga que hacer, me convertiré en una especia de Cupido de turno, para ayudar a mi buen amigo a conquistar a la mujer de sus sueños. Es ridículo creer que la vida es como un cuento de hadas, lo errores se pagan, y con creses. Uno debe asumir esto con la cabeza en alto ¿Cuántos en este mundo estarían dispuestos a ayudar a su ex a ser feliz? Yo sí. Muchos me dirían: “Lo que pasa es que nunca la amaste”. Corrección, la amo.
Conversación con una amiga respecto al tema:
Teresa: ¿Y si la amas por qué no luchas por ella?
Yo: Muy simple, porque aún no puedo sacar de mi cabeza a Diana, necesito estar un tiempo solo.
Teresa: Eres un huevón.
Yo: Sí
Teresa: La verdad que no te entiendo…
Yo: Si te pones analizar un poco. Lo que te estoy diciendo, es sensato y maduro, de cierta manera.
Teresa: En fin…Más bien, si yo te dijera que ella ha preguntado por ti, qué te gustaría que le diga.
Yo: Si pregunta por mí, dile que estoy bien, y que sueño con ella.
Teresa: ¿En verdad?
Yo: No. Ya no viene al caso. Como ya he dicho, tan solo quiero lo mejor para ella, y aunque es duro admitírmelo, ya que tengo buena autoestima, no soy el indicado en su corazón, pero sé muy bien quién sí lo es.
Teresa: ¿Quién?
Yo: Jean Pierre… Mira, sé que eres una de las mejores amigas de María Claudia, la única que no me sentenció a la ley del hielo. Me gustaría contar con tu ayuda para juntarlos.
Teresa: ¿Te has vuelto loco?
Yo: Desde que tiene cinco años, Jean Pierre ha soñado con el amor de María Claudia. Ha callado para preservar la amistad, pero eso se acabó… Hagamos algo, dime el nombre del chico más lindo que conozcas, y el del más idiota.
Teresa: Jean Pierre es el chico más lindo que conozco, y tú el más idiota.
Yo: (sonreí al escuchar la respuesta, ya que me la esperaba)
Teresa: Eres mucho mejor persona de la que crees, en fin, está bien, cuenta con mi ayuda.
Espero que todo salga bien. He comenzado a ejecutar mi plan. Ya tengo el apoyo de Teresa, un buen comienzo diría yo.
¿Estarías dispuesto a ayudar a tu ex a ser feliz en una situación parecida? Comenta, quizá tengamos algo en común.
Jhonnattan Arriola
si la situacion fuese similar, creo q el verdadero amor se refleja en las acciones q uno esta dispuesto a arealizar para hacer feliz a la otra parte, asi q si el fin es justo, probablemete lo aria, x amor asta las mas grandes estupideces llegan a ser grandes hazañas
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.
ResponderEliminarpuede que si ayude, seria justo sino estoy enamorada creo q seria lo mejor.
ResponderEliminarmuy buena historia... gracias :)
sabor a cereza, piernona, potoncita.
algo parecido sucede en tu vida? y si estas ENAMORADO dejarias de luchar por la persona a quien amas ?
ResponderEliminarmuy buena historia...como siempre...asi q teresa esta de acuerdo contigo??...jajaja..no c porq ese personaje tendria q ver algo con la realidad??...mmm...no c si estari dispuesta a hacer lo que hace el personaje..m dejas pensando...tere
ResponderEliminarkmo siempre una muy buena historia!!...si es por amor verdadero, vale la pena!!...si fuese x la felicidad del ser amado, todo es valido!!...CHICOS FELICITACIONES X EL BLOG!!
ResponderEliminar